Están en todas partes: en los bosques y en el pan, en los recetarios de cocina de otoño y en el aire que respiramos, en la corteza de un limón que se pudre, en los cuentos folklóricos y en el queso, en las aceras, en el excremento de los herbívoros y en el fondo del mar. También en la copa de vino, la jarra de cerveza y los antibióticos. Son los hongos, organismos multiformes a los que no se concedió un reino propio hasta 1959, pese a que llevaban millones de años en el planeta. Desde entonces los fungi, denominación científica, comparten corona con el reino animal, el mineral y el vegetal. Y «Hongos» es una introducción descacharrante a ese mundo diverso, planteada de modo original, no como un libro divulgativo al uso, sino en forma de revista o boletín de noticias redactado y editado por los propios hongos.