"A mí, el bordado me salvó”, estas son las primeras palabras de mi libro. Cuando intenté ser madre comenzó un vía crucis del que sólo hallé la salida en el bastidor.
En este libro tejo la historia de aprendizaje y búsqueda de identidad, y también la de otras mujeres como Jane Austen, May Morris o Louise Burgeois, cuyas trayectorias fueron atravesadas por la aguja.