ZETKIN COLLECTIVE / MALM, ANDREAS
En los últimos años la extrema derecha ha hecho todo lo posible por acelerar el calentamiento: un presidente estadounidense que cree que es un engaño ha eliminado los límites a la producción de combustibles fósiles. El presidente brasileño ha abierto el Amazonas y lo ha visto arder. En Europa, los partidos que niegan la crisis e insisten en la máxima combustión han irrumpido en los gobiernos, de Suecia a España. Al borde del colapso, han surgido las fuerzas que más agresivamente promueven el business as usual, siempre en defensa del privilegio blanco, contra supuestas amenazas de otros no blancos. ¿De dónde vienen El primer estudio sobre la extrema derecha en la crisis climática, æPiel blanca, combustible negroÆ presenta un barrido revelador de una nueva constelación política, y revela sus profundas raíces históricas. Las tecnologías que utilizan combustibles fósiles nacieron impregnadas de racismo. Nadie las amó con más pasión que los fascistas clásicos. Ahora han surgido fuerzas de derechas, algunas de las cuales afirman tener la solución: cerrar las fronteras para salvar a la nación