Nunca podemos leer las palabras de un libro o de una página web sin que nos influya su diseño. La tipografía, el diseño visual del lenguaje escrito, puede hacer que la comunicación sea más accesible, más significativa o más atractiva. Nos relacionamos con la tipografía no solo como lectores, sino siempre que tomamos decisiones sobre fuentes o diseño cuando escribimos en ordenadores, tabletas y teléfonos móviles.