Yo no quería perder la cabeza por amor; y lo hice varias veces. Yo quería tener una casa en Las Landas; y vivo de alquiler. Yo imaginaba canciones con arreglos perfectos y creé Los Sencillos. Grabamos «Bonito es». Fue un gran hit. Todavía hoy se baila.
Yo canté con Jeanette.
Yo no quería que me llamarais gordo.
Yo no quería salir en televisión; y lo hice. Se me daba bien; pero me gusta más la radio.
Desperté en sofás ajenos, de los que algunos amigos no despertaron jamás.
Bebí y esnifé sobre mesas de cristal, pero también puse la banda sonora a unas cuantas
vidas.
Yo no quería tener miedo.
Yo solo quería bailar hasta morir.
Perdí amantes y gafas y aviones. Gané favoritas y discos; también fracasos.
Me dijeron que no era lo suficientemente indie para ellos. Y ahora tienen una paga
del partido.
Yo no quería ser Miqui Puig; pero lo fui.
Lo soy.
Aunque a veces duela.
Con prólogo de Kiko Amat
«El disco más sincero de Miqui Puig: letra, música, gritos y ausencias». Carlos Zanón
«Reconoceréis al músico y al personaje y conoceréis al verdadero Miqui. Mi amigo». Blanca Lacasa